
Alimentación saludable
Controla tu peso1,2
La alimentación contidiana influye en la evolución de la psoriasis y de la artritis psoriásica. La inflamación crónica y el permanente recambio cutáneo hace que los pacientes con psoriasis y artritis psoriásica tengan nececidades nutricionales especiales.
Es aconsejable seguir una dieta saludable, como la mediterránea, evitar el sobrepeso, el tabaco y el alcohol. Así, mantener un peso saludable puede ayudar a reducir la gravedad de la psoriasis y minimizar el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas.
Controlar el peso te ayudará en distintos aspectos:
- Las personas con psoriasis y obesidad tienen mayor probabilidad de desarrollar artritis psoriásica.
- Las personas con obesidad pueden tener mayor probabilidad de presentar psoriasis grave que aquellas que tienen un índice de masa corporal normal.
- La obesidad también aumenta el riesgo de desarrollar otras enfermedades como las enfermedades cardiacas y la diabetes.
Dieta anti-inflamatoria1,2
Algunos nutricionistas y profesionales de la salud recomiendan cambiar los hábitos alimentarios con el fin de disminuir la inflamación asociada a la artritis psoriásica y psoriasis. Algunas de estas recomendaciones son:
- Consumir mucha fruta y verdura.
- Reducir el consumo de grasas saturadas y trans, presentes en carnes rojas grasas, cerdo, piel de pollo y lácteos enteros, además de en diversos aceites como el aceite de palma.
- Evitar las grasas trans, que son grasas hidrogenadas presentes en la mayoría de alimentos procesados.
- Disminuir el consumo de hidratos de carbono procesados y aumentar el consumo de cereales integrales.
- Comer proteínas magras, como pollo sin piel y reducir el consumo de carnes rojas y productos lácetos enteros.
- Evitar el consumo de alimentos refinados y procesados.